Profesor Tornasol - Tintín y los Pícaros (1976)
Inventor genial, despistado, sordo hasta rayar en la ridiculez, el profesor Tornasol aparece por primera vez en 1944, con la publicación de El tesoro de Rackham el Rojo. Su presencia quedará ya apuntalada, puesto que al final del relato su dinero permite al capitán Haddock adquirir la mansión de sus antepasados??, el castillo de Moulinsart.
Los espías del cohete lunar lo bautizaron el «mamut». ¿Era acaso por la enormidad... de su inteligencia?
Para el nombre de Tornasol, Hergé se inspiró en una persona real. Tryphon, su nombre en la versión en francés, tan deliciosamente anacrónico, lo tomó prestado efectivamente el autor de un carpintero al que conocía y que vivía cerca de su casa. Por sí solo este nombre, acoplado a este apellido que explica el interés del profesor por la astronomía, resume todo el carácter.
De la familia de Silvestre Tornasol no sabemos prácticamente nada. El único indicio que desvela al respecto es en forma negativa: ¡nunca ha tenido una hermana (Tintín y los Pícaros)!
Muy distraído, aquejado de sordera, intuitivo y sentimental en extremo, a través de su péndulo establece con la realidad unas conexiones inesperadas, a veces del todo surrealistas.
Presenta todas las características del científico decidido a imponer sus ideas: una seguridad sin fisuras, una obstinación sin límites y un toque de irritabilidad.
La sordera de Tornasol es una fuente inagotable de malentendidos que lo convierten en un personaje cómico. Al igual que muchas personas con defectos auditivos, se niega a reconocerlo y solo admite ser ligeramente duro de oído.
Esta sordera se la podría haber inspirado el abogado Paul Eydt, colaborador del Vingtième Siècle, cuya discapacidad era motivo de bromas en la redacción.
El profesor Tornasol es un romántico en el sentido más amplio, que cumple un sueño tan ambicioso como enviar un hombre a la Luna o que, jardinero empedernido, obtiene una nueva rosa y la bautiza «Bianca» por el nombre del objeto de su afecto, la imponente Castafiore.
Tornasol no es voluble y conservará su afecto por el ruiseñor milanés a lo largo de las aventuras venideras.
El profesor Tornasol aparece por primera vez en las aventuras de Tintín en 1944, con la publicación de El tesoro de Rackham el Rojo.
En este álbum, el profesor llama a la puerta de Tintín para ofrecerle un pequeño submarino en forma de tiburón para explorar sin riesgo las profundidades oceánicas.
Si Tornasol, desde el punto de vista psicológico, se mantiene fiel a sí mismo, no podemos decir lo mismo de su carrera científica que, cuando menos, experimenta unos saltos prodigiosos. Michel Serres lo escribió muy bien: «El itinerario fue ejemplar. El pequeño inventor para concursos Lépine se convirtió en un físico nuclear. Del desván con la cama abatible y la máquina para cepillar la ropa, pasó al laboratorio atómico». SERRES, Michel. Tintin ou le picaresque aujourd'hui, in Critique n° 358, Editions de Minuit, 1977.
Primero fino «manitas» y luego astuto inventor, Tornasol llegará a diseñar el cohete atómico que llevará a Tintín a la Luna. Tornasol es también químico y no anda escaso de talento. Pone a punto, por ejemplo, el antídoto al N.14 del doctor Müller, en Tintín en el país del oro negro. El profesor es también un apasionado de la radiestesia, la creencia según la cual sería posible encontrar una fuente, un objeto perdido o a una persona desaparecida, o hasta establecer un diagnóstico médico. Además, lleva siempre encima su péndulo.
Más tarde, las codicias militares suscitadas por su generador de ultrasonidos (El asunto Tornasol), lo incitarán a reconvertirse en horticultor. Los inventos de Einstein también sufrían una suerte parecida, con gran disgusto por parte de este, que llegó a arrepentirse de su genio.
- El cohete de prueba X - FLR 6, en Objetivo: la Luna.
- El cohete lunar, en Aterrizaje en la Luna.
- El generador de ultrasonidos, en El asunto Tornasol.
- El «Super - color Tornasol», prototipo de televisor en color, en Las joyas de la Castafiore.
- La rosa blanca «Bianca», en Las joyas de la Castafiore.
- El comprimido que da un sabor desagradable al alcohol, en Tintín y los Pícaros.
- El carro lunar, en Aterrizaje en la Luna.
- La máquina de cepillado, en El tesoro de Rackham el Rojo.
- El patín motorizado, en Stock de coque.
- El antídoto para el N.14, en Tintín en el país del oro negro.
- El traje espacial lunar, en Aterrizaje en la Luna.
- La cama abatible, en El tesoro de Rackham el Rojo.
- La Tornasolita, en Objetivo: la Luna.
- El tiburón submarino, en El tesoro de Rackham el Rojo.
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